Dr. Guillermo Haro Belches
P R E S E N T E
Luis de Guerrero Osio y Rivas, ciudadano de la República, con la personalidad y generales ya acreditados ante la Cámara comparezco por mi propio derecho, y en descargo de mis obligaciones cívicas, a ejercer las facultades que me otorga el último párrafo del Art. 109 constitucional, y digo:
En el contexto de los mismos delitos que comprueban la invasión de nuestro sistema jurídico tradicional por el Imperialismo Internacional Talmúdico, y que enlazan mi denuncias pendientes desde el 25 de marzo del 2007 contra Marcelo Ebrard Casaubon y miembros de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal; mis posteriores del 29 de mayo del mismo año contra Eduardo Medina Mora entonces Procurador General de la República; contra los integrantes del Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación del 13 de noviembre de 2008 hasta mi última del 25 de marzo del presente año contra el ahora titular de la PGR Arturo Chávez Chávez; todas aun sin resolver por la Cámara, y en las que predominan los delitos de genocidio y traición a la patria, comparezco ahora a solicitar Juicio Político contra el C. Secretario de Gobernación Francisco Blake Mora por los ridículos excesos incurridos en defensa de supuestos derechos de los homosexuales por el CONAPRED, dependencia a su cargo, y fundados en la LEY FEDERAL PARA PREVENIR Y ELIMINAR LA DISCRIMINACIÓN que en su artículo 4º establece: "Para los efectos de esta Ley se entenderá por discriminación toda distinción, exclusión o restricción que, basada en el origen étnico o nacional, sexo, edad, discapacidad, condición social o económica, condiciones de salud, embarazo, lengua, religión, opiniones, preferencias sexuales, estado civil o cualquier otra, tenga por efecto impedir o anular el reconocimiento o el ejercicio de los derechos y la igualdad real de oportunidades de las personas".
Enfatizo: En el mismo contexto del que he destacado que el origen de todas las ideas imbéciles en lo intelectual; depravadas en lo moral, y criminales en lo penal enderezadas contra México y ya implantadas por el invasor en leyes, juicios y actos ejecutivos provienen del Talmud de Babilonia del rabinato judío; y de que dicho Talmud nos tiene condenados a muerte por supuesta idolatría por creer que Jesucristo es Dios; se presenta de manera complementaria esta denuncia indispen-sable por referirse al origen de los "matrimonios homosexuales" y supuestos derechos derivados de tan grotesca insensatez para su debido análisis. En los orígenes se encuentra el artículo citado.
PRIMERO: La sola palabra discriminación establece el dolo evidente en el proceder del Secretario Blake y su equipo del CONAPRED. Hace prueba plena el texto mismo de la ley, ya que la ley para ser comprensible tiene que estar acorde al contexto que la precisa. Basada o fundada es la condicionante en origen étnico o nacional. ¿Acaso ser negro implica necesariamente discriminar contra los blancos, amarillos o morenos? ¿O acaso ser nicaragüense implica necesariamente discriminar contra los hondureños, o cualquier otra nacionalidad? ¡Ah! Pero un homosexual discrimina necesariamente contra la mujer en sus derechos, como la lesbiana discrimina necesariamente contra el sexo masculino en sus derechos, ya que se trata de actividades naturalmente complementarias entre los sexos opuestos. Peor aún resulta el caso al tratar de "sus preferencias" para otorgarle "derechos". Es indiscutible para los que se conservan dentro de la definición de racionales versus los animales, que el amor, afecto, estimación, aprecio, etc., que tenemos los hombres por nuestros congéneres está basado, fundado, precisamente en lo contrario a andarles buscando el rabo: en la elevación de miras propias de la gente sana y el respeto natural que los diferencia de los degenerados. Igualmente, que dado que el verdadero amor es respeto, las prácticas y obsesiones sexuales a las que son adictos estos sujetos son tan propias de perros, que el odio al hombre que caracteriza a los genocidas tuvo que definirlas y recalcarlas como derechos humanos. De esta manera, la discriminación negativa que pareciera el objeto del engendro jurídico registrado como acta de nacimiento del CONAPRED se ve amplia-mente superada como abominación por la discriminación positiva, o "preferencias sexuales activas," por las cuales estos engendros del demonio pecan casi tanto contra los racionales como contra Dios, de pensamiento; a veces de palabra, y en el deseo de las obras. De esta manera han dejado constancia de favorecer la discriminación sobre la no discriminación; y las peores discriminaciones sobre las menos graves; y a la apoteosis de la hipocresía sobre las hipocresías meramente vergonzantes.
SEGUNDO: De la misma manera que con origen étnico o nacionalidad, todo el recital de: sexo, edad, discapacidad, condición social o económica, condiciones de salud, embarazo, lengua, religión, opiniones, preferencias sexuales, estado civil. . . Manifiesta claramente que "preferencias sexuales" exige ser tan inocente como tener o carecer de salud, estatus, estado civil, etc.; lo que exige distinguir entre preferencias abstractas y degeneraciones sexuales, que fue lo criticado abiertamente por un cardenal, y abiertamente condenado por el CONAPRED en su perjuicio. Y lo grave del asunto de las "preferencias sexuales," ha sido la forma en que se ha extendido dolosa-mente hasta los "matrimonios" entre homosexuales, lo que ya implica una institucionalización de las degeneraciones sexuales en perjuicio de la salubridad mental y de la moralidad pública.
Al punto: Gobernación y CONAPRED insisten en leer "derechos a degeneraciones sexuales" que la ley les niega a los homosexuales, al limitar dentro del contexto "preferencias sexuales" a la misma PASIVIDAD que otorga a la raza, nacionalidad, estado civil etc., incurriendo Blake por exceso en el delito de genocidio sin que el ordenamiento aludido pueda en manera alguna justificarle en tales excesos. En otras palabras, para que el ordenamiento pudiera justificar conductas favorables a la interpretación más extravagante de mis denunciados se habría requerido que este dijera abiertamente no preferencias, sino degeneraciones sexuales; igualmente se habría requerido encajar dicha descripción dentro de un contexto de actos volitivos como pudiera ser por razón de su "agresividad sexual" en vez de sexo que no depende de la voluntad; por razón de "engañar con su edad", y no por un hecho involuntario de tener tal "edad"; por "provocarse una discapacidad" en vez de padecer una discapacidad; etc. Tan obvio como que no es lo mismo querer que padecer, ni ser respetuoso puede equipararse con ser vicioso.
Pero el solo hecho de una emboscada al insertar una conducta típica dentro de un conjunto de características no conductuales, sitúa el acontecer dentro de lo ya muy publicitado de reducir hasta en un 80% la población del mundo, y a mis denunciados dentro del complot para lograrlo. En el caso, con la promoción y dignificación de la esterilidad propia de la conducta sexual contra natura que caracteriza a estos sujetos.
TERCERO: ¡La estupidez no tiene derechos!
Con singular perfidia se ha confundido recientemente al estúpido, que ciertamente sí tiene derechos, con sus estupideces, las cuales carecen de ellos. La elección de la vía legislativa para otorgar a la estupidez derechos soberanos sobre todos los mexicanos exige la inmediata acción penal contra los responsables, ya que la intención de embrutecernos, imponiendo por ley sandeces sin precedente para regir a la nación no puede tener otra meta.
El atentado contra nuestras facultades de raciocinio no debe quedar impune más tiempo. Sumar al atentado legislativo promotor de los `matrimonios homosexuales' --algo que ni a los homose-xuales se les había ocurrido en la larga historia de la sodomía--y el criminal abuso de facultades y autoridad de los ministros de la SCJN en su infame fallo judicial, descubre adicionalmente que el complot sigue su marcha; y la complicidad en estos hechos del poder ejecutivo personificado por Marcelo Ebrard completa el cuadro y confirma a los tres poderes distintos vueltos rabiosamente contra la nación.
La aberrante disculpa de hacer extensivos los derechos de los imbéciles a sus imbecilidades, no ha topado, como fuera de esperarse, con el impedimento que los derechos de los racionales han puesto tradicionalmente a esta forma de "progreso" capaz de convertir a la nación en un establo moralmente pestilente. En pocas palabras, ciudadanos diputados, la especie "animal racional" de mexicano nos la están abreviando a "animal" a secas. Y todo este cúmulo de sandeces consignarlo al "buen corazón" del perredismo que no puede tolerar que a un jotito se le mire feo, o se le niegue su derecho a vestir de blanco el día de su "boda". Que el afeminado corazón esté a punto de ser convertido por ley en corazón de león por milagro legislativo ya no es imposible por mucho que repugne a la razón, ¡porque en esos lares la razón ha dejado de existir!
Transmugrar en "animal" al antes "animal racional" es genocidio, ya que el tipo penal invocado --Art. 149-Bis del C.P.F.-- tiene por objeto salvaguardar la racionalidad de la cual se pretende despojarnos; y una vez despojados, ni la Sociedad Protectora de Animales garantiza tutelar el remanente. Las bajas se irán sumando en la medida en que vaya teniendo éxito; éxito que de no haberse logrado ya, plenamente, en los perredistas y sus cómplices, dejarían la fechoría en algo tan increíble y trivial como los anales del humor negro. Pero el asunto no deja lugar a dudas al ser sólo un añadido más a los feticidios que rebasan ya los cuarenta mil registrados. La PROMOCIÓN de la homosexualidad es la apoteosis del genocidio paladinamente admitido en la esterilidad que se reclama como disculpa para colocar a menores indefensos en manos de las castas vírgenes homosexuales. Es indispensable recordarles sobre este punto, ciudadanos diputados, que el derecho natural es el único aceptado por nuestros expositores como dominante. Así lo dice la historia de la doctrina mexicana de todo el siglo XX hasta estos principios del XXI; y que la homosexualidad es contra natura; que es imposible hablar de matrimonios del mismo sexo entre nosotros los mexicanos; y que este dato adicional vuelve a subrayar el peligro de la colonización de nuestro México por el rabinato y sus secuaces del talmudismo internacional.
CUARTO: La perogrullada "¡La estupidez no tiene derechos!" exige remarcar que no los tiene porque estos pertenecen a la inteligencia, y que otorgárselos implicaría la idiotez social como castigo. La diferencia entre embrutecernos o ilustrarnos jamás podrá quedar clara sin la sanción penal contra los responsables. Responsables de impulsar hasta imponer el libro imbécil del Talmud a los no judíos: Con feticidios permitidos, homosexualidad preferenciada, pederastia tolerada, y defender de la discriminación a los únicos que discriminan a todos los que no son ellos: los judíos y los homosexuales.
QUINTO: El delito lo es por razón del daño. Y correspondientemente, a mayor daño, mayor penalización. En este sentido, NADA HAY TAN DAÑINO COMO LA HOMOSEXUALIDAD. Así lo han reconocido los siglos condenando a los homosexuales a muerte. Toda la tradición bíblica, tanto la veterotestamentaria como la cristiana lo han reconocido así. Veamos algunas citas:
"No te acostarás con varón como con mujer; es abominación. . . .Yo, Yahveh, vuestro Dios. (Levítico 18:22-30)
Si alguien se acuesta con varón, como se hace con mujer, ambos han cometido abominación: morirán sin remedio; su sangre caerá sobre ellos. (Levítico 20:13)
La mujer no llevará ropa de hombre ni el hombre se pondrá vestidos de mujer, porque el que hace esto es una abominación para Yahveh tu Dios. (Deuteronomio 22:5)
No llevarás a la casa de Yahveh tu Dios don de prostituta ni salario de perro (homosexual), sea cual fuere el voto que hayas hecho: porque ambos son abominación para Yahveh tu Dios. (Deuteronomio 23:19)
Vuélvete al Altísimo y apártate de la injusticia, odia con toda el alma la abominación. (Eclesiástico 17:26)
Entonces Yahveh hizo llover sobre Sodoma y Gomorra azufre y fuego de parte de Yahveh. Y arrasó aquellas ciudades, y toda la redonda con todos los habitantes de las ciudades y la vegetación del suelo. (Génesis 19:24-25)
«No penséis que he venido a abolir la Ley y los Profetas. No he venido a abolir, sino a dar cumplimiento. (Mateo 5:17)
Por eso Dios los entregó a las apetencias de su corazón hasta una impureza tal que deshonraron entre sí sus cuerpos; a ellos que cambiaron la verdad de Dios por la mentira, y adoraron y sirvieron a la criatura en vez del Creador, que es bendito por los siglos. Amén. Por eso los entregó Dios a pasiones infames; pues sus mujeres invirtieron las relaciones naturales por otras contra la naturaleza; igualmente los hombres, abandonando el uso natural de la mujer, se abrasaron en deseos los unos por los otros, cometiendo la infamia de hombre con hombre, recibiendo en sí mismos el pago merecido de su extravío. Y como no tuvieron a bien guardar el verdadero conocimiento de Dios, entrególos Dios a su mente insensata, para que hicieran lo que no conviene: llenos de toda injusticia, perversidad, codicia, maldad, henchidos de envidia, de homicidio, de contienda, de engaño, de malignidad, chismosos, detractores, enemigos de Dios, ultrajadores, altaneros, fanfarrones, ingeniosos para el mal, rebeldes a sus padres, insensatos, desleales, desamorados, despiadados, los cuales, aunque conocedores del veredicto de Dios que declara dignos de muerte a los que tales cosas practican, no solamente las practican, sino que aprueban a los que las cometen. (Romanos 1:24-32)
Pues si Dios no perdonó a los Ángeles que pecaron, sino que, precipitándolos en los abismos tenebrosos del Tártaro, los entregó para ser custodiados hasta el Juicio; si no perdonó al antiguo mundo, aunque preservó a Noé, heraldo de la justicia, y a otros siete, cuando hizo venir el diluvio sobre un mundo de impíos; si condenó a la destrucción las ciudades de Sodoma y Gomorra, reduciéndolas a cenizas, poniéndolas como ejemplo para los que en el futuro vivirían impíamente; y si libró a Lot, el justo, oprimido por la conducta licenciosa de aquellos hombres disolutos- pues este justo, que vivía en medio de ellos, torturaba día tras día su alma justa por las obras inicuas que veía y oía - es porque el Señor sabe librar de las pruebas a los piadosos y guardar a los impíos para castigarles en el día del Juicio, sobre todo a los que andan tras la carne con apetencias impuras y desprecian al Señorío. (II Pedro 4:10)
Me dijo también: «Hecho está: yo soy el Alfa y la Omega, el Principio y el Fin; al que tenga sed, yo le daré del manantial del agua de la vida gratis. Esta será la herencia del vencedor: yo seré Dios para él, y él será hijo para mi. Pero los cobardes, los incrédulos, los abominables (homosexuales), los asesinos, los impuros, los hechiceros, los idólatras y todos los embusteros tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre: que es la muerte segunda. (Apocalipsis 21:6-8)
Que el injusto siga cometiendo injusticias y el manchado siga manchándose; que el justo siga practicando la justicia y el santo siga santificándose. Mira, vengo pronto y traigo mi recompensa conmigo para pagar a cada uno según su trabajo. Yo soy el Alfa y la Omega, el Primero y el Último, el Principio y el Fin. Dichosos los que laven sus vestiduras, así podrán disponer del árbol de la Vida y entrarán por las puertas en la Ciudad. ¡Fuera los perros (homosexuales), los hechiceros, los impuros, los asesinos, los idólatras, y todo el que ame y practique la mentira!» (Apocalipsis 22:11-15)
No os engañéis; de Dios nadie se burla. Pues lo que uno siembre, eso cosechará: (Gálatas 6:7)
Doce citas bíblicas. Doce referencias al libro milenario. Doce, al texto más influyente de todos los tiempos. Y el origen perredista (comunista) del asunto, ¿Qué informa oficialmente al respecto?
H. SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN
PRESENTE
La suscrita, Diputada María Alejandra Barrales Magdaleno, en mi carácter de Presidenta de la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, V Legislatura, personalidad que ostento de conformidad con(....)ante Ustedes respetuosamente comparezco a fin de presentar el siguiente:
I N F O R M E
[27] No es este el espacio para exponer una historia pormenorizada de la homofobia, pero re-sulta indispensable recordar momentos claves que marcan la trayectoria de la homofobia del cénit de la prohibición penal al nadir de la proscripción constitucional. Las formas en las que se ha perpetuado la homofobia se pueden clasificar en tres grandes rubros: la represión penal, la patologización médica y el encubrimiento jurídico. Las dos primeras
surgieron en el siglo XIX y caducaron al cerrar el siglo XX. Sin embargo, la tercera forma no ha desaparecido aún: el encubrimiento es el arma que se utiliza para reprimir y controlar aún hoy a quienes hemos etiquetado como homosexuales.
La obvia intención de la diputada Alejandra Barrales Magdaleno de minimizar la gravedad de la homosexualidad refiriéndose a su rechazo como "homofobia", o sea como una psicopatología no de los homosexuales, sino exclusiva de quien los rechaza, la agrava como representante del imperio de la mentira al restringir la historia de su represión penal: al siglo XIX sus orígenes, y al cierre del XX su existencia. Dos mentiras flagrantes a menos que los textos milenarios que citamos arriba se hayan escrito el siglo XIX; y que lo condenado con anterioridad por la Sagrada escritura y las leyes penales de Occidente haya sido "cuentos homofóbicos"; y que los psicópatas seamos las gentes de conducta normal en vez de los homosexuales. Al respecto establece el Código Penal Federal:
Artículo 247.- Se impondrán de cuatro a ocho años de prisión y de cien a trescientos días multa:
V.- Al que en juicio de amparo rinda informes como autoridad responsable, en los que afirmare una
falsedad o negare la verdad en todo o en parte.
Lo que se viene sumando a mis casos contra los ministros de la SCJN por su nuevo desprecio al derecho, al admitir sin objeción tamaños embustes contra el derecho que los penaliza; y al pérfido y traidor PRD de los genocidas del pueblo de México en las personas de sus responsables.
El delito lo es por razón del daño. A mayor daño mayor penalización. Cuantificando:
Son incuantificables por su magnitud. Pero demos una idea: Cada ser humano vivo al día de hoy fue engendrado por un padre y una madre; o sea que tuvo cuatro abuelos, ocho bisabuelos; dieciséis tatarabuelos etc. Si vamos hacia atrás ocho generaciones tenemos dos a la octava potencia, 256 antepasados. Si vamos 9 generaciones atrás en que tuvimos 512 antepasados entendemos que habría bastado con uno que se hubiera vuelto homosexual o lesbiana para privar de la vida al hoy viviente, y a 256 de sus antepasados. Aunque hubiera tenido un suplente para engendrar a otros 257, otros serían, lo que significa que privar de la vida a otro como homicidio es un daño que no se repara engendrando a otro. Estos son hechos reales, materialmente indiscutibles. Daños que sólo el vicio pretende negar para salir triunfante. Y para poder negar esto habría que valorar formalmente al vicio sobre la vida.
Hasta los judíos en su Talmud hacen cálculos para reclamar a los que dejaron de nacer contra los enemigos que les causaron un gran número de bajas. Por las guerras Romano-judías que tuvieron lugar entre el año 70 y el 135 de la Era Cristiana, el Talmud dice que los romanos les causaron entre 40 y 4000 millones de bajas cuando su población total para la época sería de unos cuatro a seis millones.
Artículo 302 (C.P.F.) .- Comete el delito de homicidio: el que priva de la vida a otro.
Y la conducta exigible es valorar cada vida ajena como la propia, por ser igual que la propia: individual, irremplazable e insustituible.
Y los homosexuales están privando de sus derechos no sólo a sus descendientes, sino a las mujeres como hemos visto. Se trata de discriminaciones con consecuencias tan dolorosas como pueden darse, por ejemplo, en el caso que el marido le ponga los cuernos con otro en vez de con otra a la esposa. Adulterio con los máximos agravantes, y con el deseo explícito de que estos casos se extiendan a toda la población ¡de parte de sus tiernos perredistas!
Omitió igualmente la diputada Alejandra Barrales Magdaleno, que las leyes penales medievales ajusticiaban a los homosexuales en la hoguera, como que nada ha sido tan abominable a Dios y a los hombres como estos degenerados. Las disculpas que se pretende hacer valer en su favor son tan despreciables como las que se quiere hacer valer para el aborto feticida. ¿Qué nacieron así? Pues aún en este caso, en el de las tendencias, lo mismo tiene que aguantarse las ganas el violador de mujeres, el seductor de mujeres o la seductora que el ladrón ¡por muy proclive que haya nacido a meter mano al bolsillo ajeno! Cuando la ley deja de penalizar las conductas que perjudican los intereses de terceros, se acaba la paz. El respeto al derecho ajeno es la paz, y los peores enemigos de la paz en nuestro medio son los talmúdicos promotores de joterías y feticidios.
¡ DIPUTADOS ! Ya no se trata tan solo de vernos la cara de imbéciles, sino de dejarnos imbéciles.
C.P.F.: Artículo 149-Bis.- Comete el delito de genocidio el que con el propósito de destruir, total o parcialmente a uno o más grupos nacionales o de carácter étnico, racial o religioso, perpetrase por cualquier medio, delitos contra la vida de miembros de aquellos, o impusiese la esterilización masiva con fin de impedir la reproducción del grupo.
Este "o impusiese la esterilización masiva con fin de impedir la reproducción del grupo" por medio de la dignificación y promoción gubernamental de la homosexualidad contradice la conducta exigible de penalizar esta aberrante dignificación hasta los extremos del matrimonio. En este asunto ya están involucrados el titular de la PGR por omiso en sus funciones; los ministros de la SCJN, el titular de la SG y los diputados de la ALDDF.
Adicionalmente, el segundo párrafo del mismo artículo establece: "Si con idéntico propósito se llevaren a cabo ataques a la integridad corporal o a la salud de los miembros de dichas comunidades o se trasladaren de ellas a otros grupos menores de diez y seis años, empleando para ello la violencia física o moral, la sanción será de cinco a veinte años de prisión y multa dos mil a siete mil pesos", lo que sanciona la adopción de menores por los "matrimonios homosexuales" equivalente a trasladar menores indefensos a grupos de anormales. La conducta exigible es, obviamente, penalizar este delito con la debida severidad en vez de aprobarlo.
Todo lo anterior se va sumando a los casos anteriores, recordando por su importancia que 90% de los mexicanos estamos condenados a muerte por idolatría, que así califica el Talmud de los rabinos nuestra fe en Jesucristo. Las pruebas de todo esto han sido aportadas, cada nuevo caso viene a confirmar el peligro mortal en que estamos todos los mexicanos. Cada nuevo caso sigue ajustando a la letra con el Art. 149-Bis, Genocidio. Es obligación inaplazable proceder contra los responsables ante las evidencias del agravamiento de la situación.
Ciudadanos diputados: somos y hemos sido siempre una sociedad discriminadora como corresponde a seres racionales. Tenemos en las cárceles de la nación discriminados a todos aquellos que no podemos dejar en libertad para que nos dañen. Discriminamos sin duda. Tenemos que discriminar de esta manera para sobrevivir como nación, de manera que nada hay más idiota que pretender lo contrario, que exigir que no se discrimine a nadie, o que toda idea de hacerlo sea necesariamente perversa.
Es por consiguiente indispensable erradicar de entre nosotros a aquellos que creen haber triunfado irremediablemente de nuestra idiotez volteándonos el chirrión por el palito; pretendiendo que pueden discriminar en contra nuestra sin que lo notemos. Que creen haber logrado que aceptemos los más sucio y reprobable como normal, y hasta como óptimo e insuperable lo que nuestra mexicanidad ha tachado de insufrible. Los que tal pretenden estaban previstos en nuestro himno nacional con sorprendente precisión: "Más si osare un extraño enemigo profanar con su planta tu suelo, piensa oh patria querida que el cielo un soldado en cada hijo te dio".
Por lo anteriormente expuesto y fundado solicito:
UNICO: Se admita la presente denuncia como complemento de las anteriores y se apresure el trámite del conjunto como lo tengo solicitado.
México D.F. a 29 de septiembre de 2010
Protesto lo necesario.
¡QUIEN COMO DIOS!
Luis de Guerrero Osio y Rivas
Ciudadano de la República
